13 Razones Para Trabajar Como Freelance

¿Alguna vez te has imaginado no tener que escuchar constantemente a tu jefe decirte que tienes que hacer tal o cual cosa adicional al trabajo que tenías programado hacer, o que incluso te pida cambiar tu horario de trabajo?

Estos son sólo algunos de los detalles que tienes que aguantar mientras eres un empleado. Tener un negocio propio es el objetivo que está en la mente de muchos trabajadores, pero la verdad solo unos pocos lo alcanzan.  Las razones pueden ser variadas, pero quizás la más importante de todas es el hecho de que muchos no creen que podrán tener éxito. Pero estas razones no surgen de la nada ni por pura inconformidad en la mente, en este artículo verás las 13 razones por las que debes trabajar como un profesional independiente (autónomo), y descubrirás que este estilo de vida tiene mucho más factores positivos que negativos.

¿Por qué no pueden todos trabajar por cuenta propia?
Tener un negocio propio cuando se hace de la forma correcta tiene muchas ventajas, pero también conlleva mucha dedicación, persistencia, organización personal y creer mucho en ti.   Por desgracia, no todo el mundo puede tener estas capacidades y, finalmente, el resto de su vida trabaja bajo las órdenes de alguien y consideran que alguien más es quien debe pensar lo que deben recibir. A veces la gente se frustra porque nunca han tenido tiempo para hacer lo que realmente les gustaría haber hecho en sus vidas y siempre culpan la falta de tiempo para hacerlo.

El trabajo debe ser algo que nos de placer y no considerarlo tedioso ni algo que te hace perder el tiempo. Pero eso parece muy improbable ver a alguien que trabaja para otra persona con la sujeción a las horas que esta persona decida.

En este artículo espero demostrar todo lo positivo que un trabajo como freelancer puede tener, ayudándote a perder el miedo a trabajar por tu cuenta.

1. Define lo que harás en tu negocio
Trabajar como freelance bien podría ser sinónimo de libertad. En mi opinión, este es el punto que más motiva a muchos a trabajar por su cuenta. Tonto el que piensa que tener tiempo libre significa que puedes pasar la mañana en la cama y conseguir el resto del día sin hacer nada.

Establecer tu propio tiempo de trabajo significa trabajar las horas que quieras de tu tiempo. Tienes que cumplir ese momento de manera sagrada y cumplirlo como si fuera un trabajo convencional o sino correrás el riesgo de que cuando te veas sin dinero tendrás que trabajar un fin de semana cualquiera. Tendrás que hacerlo por tu empresa, que no esté eso nunca en duda, pero en este caso puedes decidir cuándo y cómo hacerlo.

2. Obtienes el 100% del beneficio de lo que tu negocio genera
¿Alguna vez has tratado de averiguar cuánto genera la empresa donde trabajas como empleado y la cantidad que recibes al final del mes? Si aún no, te aconsejo a que no lo hagas, puede ser muy desmotivante para ti como empleado.

Es frustrante ver que a veces sólo recibes menos de un 5 a 10 por ciento de lo que genera la empresa. Cuando trabajas como freelance, lo que estás generando es para ti. Por supuesto, asumes el riesgo si el negocio va mal, hay que invertir, etc. Pero habrá que tomar decisiones. Por eso pregúntate a ti mismo, prefieres trabajar toda una vida para recibir sólo una pequeña parte de lo que produces o ganarte todos los beneficios, incluso con algún riesgo?

3. Trabajas donde quieras
Imagínate el día de un empleado en una oficina: despierta, toma el desayuno, enciende el coche y se va a la oficina. Y pasa gran parte de su tiempo encerrado en un cubículo de unos pocos metros cuadrados, a la espera de algunos días de vacaciones para poder pasar tiempo al aire libre.   A menos que decidas tener un establecimiento permanente, trabajando como freelancer puedes establecer la ubicación en la que deseas presentar tus productos o prestar tus servicios. Una cafetería con terraza exterior en un banco del jardín o incluso en otra ciudad lejos de tu residencia, en cualquier lugar que sirve de luz para tu ordenador portátil o teléfono móvil.

4. Defines el futuro de tu negocio
Una de las cosas que llevan poco a poco a muchos abandonar su empleo es la incapacidad para definir la dirección que la empresa este tomando. Regularmente existen problemas que creían poder visualizarse y solucionarse de una forma programada, pero no pueden realizar ninguna acción porque siempre dependen de que se autorice ya sea por el gerente o dueño de la empresa.

La verdad es que al tener tu propio negocio eres tu quien decide qué se debe hacer para que tu trabajo sea más productivo. El control de los gastos y la toma de decisiones dependen sólo de ti mismo, y esto da una sensación de libertad que seria imposible de lograr si se trabaja para otro.

 

5. Crecimiento mas rápido como profesional
Al crear tu propia empresa también pondrás más responsabilidad sobre tus hombros, ya que ante el más mínimo error no puedes culpar a otro por ello, tu eres siempre el responsable. Al tener esta mayor responsabilidad en última instancia, requieres mucho más de ti, obligándote a ser más atento a tus actitudes.

Este nuevo peso que tienes en tus hombros, aunque parece bastante estresante al principio, la verdad es que te permite crecer como profesional mucho más rápido, que si lo tuvieras como empleado. Esta atención extra tendrá que hacerte sentir la necesidad de aprender más para poder estar un paso por delante de sus competidores. Trabajar como autónomo aumenta tus responsabilidades, pero sin duda también aumentan (y mucho) tu capacidad para trabajar.

6. Aumento de la productividad
Como mencioné en el punto anterior, llevar tu propio negocio incrementa tus responsabilidades, y también provoca otro factor: la proactividad creciente. Con todas las demandas de que serás objeto, tendrás que aprender a no tener siempre a alguien que te diga lo que debes hacer, tendrás más iniciativa y serás menos dependiente de las órdenes de alguien más.

Ser proactivo es sin duda una de las grandes armas de las personas de éxito, que saben que para llegar a la cima en cualquier área que sea, dependerá en gran medida por su cuenta, de su deseo de alcanzar ese sueño.

7. No corres el riesgo de ser despedido
Cuando hablas acerca de cómo crear tu propio negocio con otras personas, la frase principal que he oído, y no pocas veces, es: «¿Por qué no sigues trabajando en tal empresa, ahí tienes tu sueldo a fin de mes y puedes crecer económicamente con el tiempo.» ¿te parece familiar?

Pues bien, esta frase tiene dos cosas que cualquier exitoso profesional independiente o empresario no se ponen de acuerdo: la primera es que el crecimiento no se debe hacer «con el tiempo», porque todo el que cree que así es, es susceptible a ningún progreso en el trabajo, la segunda es que, hoy más que nunca, el salario no es una cosa segura al final del mes.

Nadie te garantiza que a partir de hoy para mañana continuarás en tu puesto de trabajo. Si trabajas como freelance, simplemente no harás un montón de dinero si no puedes mantener tu negocio. La responsabilidad es tuya y decidirás tu futuro, y podemos garantizar que tu trabajo tendrá siempre éxito si lo haces con dedicación, esfuerzo y amor.

8. Creas tu propia red de contactos
Ser un profesional independiente significa, al menos inicialmente, ser el encargado de toda tu red de contactos, ya que en realidad vas a vender un producto o un servicio y alguien tendrá que buscar a cualquier persona interesada en él. Esta misma red de contactos es una garantía de que puedes vender más del mismo producto, creación de vínculos que pueden ser muy beneficiosos para el futuro de tu negocio.

9. Mayor reconocimiento
A menudo vemos excelentes productos en el mercado, pero no tenemos idea de quién está detrás de todo esto, sólo sabemos que fue producido por la empresa X. Cuando trabajas como freelance y haces un buen trabajo, terminas con todos tus créditos de esa iniciativa, abriendo nuevas puertas para que los proyectos más atractivo y gratificante económicamente y profesionalmente lleguen a ti.

10. No tienes que aguantar a un jefe
A veces, las tareas que no le gusta hacer a un jefe son las que te pide que la hagas tu. También tienes que lidiar con los cambios de humor que pueda tener, en última instancia, arruina tu día.

Un buen jefe te puede llevar al éxito, pero uno malo puede arruinar su autoestima. En tu propio negocio eres tu líder, das tus propias órdenes y tratas de encontrar la mejor manera de motivarte.

11. No tienes que pedir aumento
Si tu negocio crece, tus ganancias crecen con él. Nada más simple que eso. Si tu negocio crece 50% al año, tus beneficios se reflejarán en ese aumento. ¿Con qué frecuencia ocurre esto en un trabajo normal? Es raro.

12. No tienes problemas con las vacaciones
Planificar el período de vacaciones con tu jefe es siempre un tema aburrido. Se puede tomar una semana aquí y allá, y algunas veces se corre el riesgo de quedarte sin tus vacaciones.

¿Qué harías si ya trabajarás como freelance? Podrías optar por los días que quisieras para tomar las vacaciones sin tener que justificar nada a nadie. Esta libertad consiste en que puedes ir a trabajar más feliz, y por lo tanto, producir más y mejor.

13. Eres mas feliz
Es cierto que toda esta libertad da la oportunidad de aumentar tus beneficios o que tu nombre sea reconocido. Te hace sentir más satisfecho con tu trabajo, aumentando las posibilidades de éxito en tu área. Poder ser el dueño de tu tiempo y de tí mismo es sin duda una de las claves de la felicidad.

¿Aún te quedan dudas?
El miedo es, en la mayoría de los casos, el factor principal que impide a las personas alcanzar el éxito. Las causas de no creer en ti mismo, aumenta las posibilidades de fracaso.

En el artículo que acabas de leer, te di varias razones por las que debes tomar el riesgo y trabajar como un profesional independiente o autónomo, y aunque existen riesgos asociados, la verdad es que tener un negocio propio también tiene sus puntos buenos y cuando esto se logra, puede cambiar completamente tu vida. ¿Pensado en trabajar como freelance?

Con cariño y animo si se puede

 

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