Estas son las 13 mayores dificultades que enfrentan las empresas a la hora de implementar el código Cabys

La confusión en los códigos que se deben aplicar es uno de los principales problemas

Las empresas enfrentaron varios tipos de dificultades para la implementación de los códigos del Catálogo de Bienes y Servicios (Cabys), así como presentan una gran variedad de dudas a las empresas proveedoras de los sistemas de facturación electrónica.

El Cabys deben tenerlo integrado a todos los comprobantes electrónicos desde este 1° de diciembre, según lo indicado por la Dirección General de Tributación, que diseñó el catálogo junto con el Banco Central de Costa Rica tanto para fines de información de la actividad económica como para trazabilidad en materia de impuestos.

Los especialistas recomendaron que las empresas, profesionales que brindan servicios y contribuyentes acudan a asesoría que les ayuda a solventar los problemas, recordando que las facturas electrónicas no obtendrán la validación respectiva si no incluyen el código correctamente.

En redes sociales los contribuyentes mostraron molestia por el mes elegido para iniciar la obligatoriedad del código, el costo que implica en un año de crisis económica, confusión por códigos similares y falta de respuestas de atención del público tanto en la línea telefónica como de correos electrónicos.

El Ministerio de Hacienda, por su parte, publicó una guía de utilización del Cabys en el facturador electrónico.

Situaciones más regulares que enfrentaron las empresas, especialmente los pequeños negocios:

1. Falta de códigos específicos para los productos. Muchas empresas esperaban encontrar específicamente sus productos codificados dentro del listado.

2. Muchas descripciones quedan sujetas a la interpretación “razonable” de cada empresa, según la naturaleza final y uso del producto.

3. Para ciertas pymes, los códigos Cabys tienden a ser muy específicos, lo cual conlleva a confusiones ya que puede tener uno o varios códigos que se pueden asociar al producto o servicio facturado.

4. Cuando se realiza una búsqueda de los códigos, no aparecen con el nombre usualmente comercializado.

5. Las empresas se confunden con los porcentajes de impuestos Impuesto al Valor Agregado (IVA) descritos, ya que estos son solamente de referencia y los mismos podían variar de acuerdo a la naturaleza final del producto.

6. Las empresas presentaron atrasos internos, en definición y ordenamiento de la información de sus productos.

7. Falta de definición inicial sobre codificación de ofertas y promociones, lo que se clarificó hasta inicios de noviembre.

8. Detalles técnicos para incorporar el código en los sistemas internos.

9. Los comercios de venta al detalle han reportado lentitud por parte de los proveedores en la entrega y registro de la información.

10. Muchas empresas venden combos o productos en forma conjunta, las cuales con Cabys deben de realizar separaciones de los productos.

11. A pesar de que el porcentaje de IVA mostrado en el código Cabys es una referencia informativa, tiende a confusión del impuesto actual que cobran las pymes.

12 .Difícil acceso a los medios de consultas indicados por Hacienda y Banco Central.

13. Productos o servicios de común comercialización, que no aparecen en los códigos Cabys.

Asimismo, se señala que las consultas que más realizan los usuarios son:

–¿Es obligatorio el código Cabys?

–¿Cómo consigo mi código?

–Si no encuentro un código similar: ¿Hay algún genérico?

–¿Puedo editar la descripción del código o agregar más datos?

–¿Es modificable el impuesto del IVA del código correspondiente?

–¿Cómo puedo ingresar el código en los productos que ya tenía cargados?

–¿Por qué Hacienda no nos brindó el código?

–¿Cómo ingreso el mismo código para varios productos de descripción diferente?

–¿Cómo anulo una factura electrónica que no tenía Cabys?

–¿Por qué el buscador no es más amigable?

El Financiero