1. Contexto del proceso de resolución financiera

El Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (CONASSIF) declaró a Desyfin como financieramente inviable el 9 de octubre de 2024, iniciando un proceso de resolución que podría extenderse hasta un año. Este proceso, regulado por la Ley 9816, tiene como objetivo gestionar de manera ordenada la inviabilidad de una institución financiera, buscando minimizar el impacto en ahorrantes, deudores y el sistema financiero en general.

2. Impacto en las partes involucradas

Ahorrantes e inversionistas

Protección de depósitos menores a ₡6 millones: Según la normativa vigente, los depósitos de hasta ₡6 millones están totalmente garantizados, independientemente del mecanismo de resolución o liquidación aplicado a la financiera.

Recuperación parcial para depósitos mayores: Los ahorrantes con montos superiores a ₡6 millones podrían enfrentar recortes en sus fondos, dependiendo de la calidad y venta de los activos de Desyfin. Se estima que alrededor de 956 personas, que representan el 24% de los ahorrantes, no recuperarán la totalidad de su dinero.

Congelamiento de fondos: Durante el proceso de resolución, los recursos de los depositantes e inversionistas permanecen congelados, es decir, no pueden ser retirados ni utilizados hasta que se determine lo contrario. Los ahorros e inversiones continúan generando los intereses pactados contractualmente; si vencen durante la intervención o resolución, generarán intereses a la tasa básica pasiva publicada por el Banco Central de Costa Rica.

Deudores

Continuidad de obligaciones: Los deudores deben continuar cumpliendo con sus pagos según los términos establecidos en sus contratos. Sus deudas son activos de la financiera que podrían ser transferidos a otra institución.

Posible cambio de acreedor: En caso de que los activos de Desyfin sean adquiridos por otra entidad, esta se convertiría en el nuevo acreedor, manteniendo las condiciones originales de los préstamos.

Empleados

Reducción de personal: Al inicio de la intervención, Desyfin contaba con 166 empleados; actualmente, mantiene 83 colaboradores enfocados en funciones críticas como cobro y labores contables. Esta reducción se debe a renuncias y despidos como parte del cese ordenado de colaboradores.

Futuro laboral: Al finalizar el proceso de resolución, se da por concluida la operación de la entidad financiera. Respecto a los colaboradores, se finaliza su contrato laboral y se cancela el monto correspondiente a los derechos laborales de ley.

3. Mecanismo de resolución aplicado

El proceso de resolución de Desyfin contempla la separación de la entidad en dos partes:

– Banco Bueno: Incluye los pasivos privilegiados y activos con valor económico, que pueden ser negociados con una entidad solvente supervisada por la Superintendencia General de Entidades Financieras (SUGEF), traspasados a una entidad puente o a un fideicomiso. La entidad solvente adquiere los créditos seleccionados y los pasivos con un posible recorte.

– Banco Malo: Contiene los activos y pasivos remanentes que no sean de interés de la entidad solvente. Estos formarían parte de un fideicomiso destinado a vender esos activos en beneficio de los acreedores. Los activos que no logren ser vendidos podrían ser subastados o trasladados a un proceso concursal (quiebra).

4. Implicaciones regulatorias y lecciones aprendidas

Fortalecimiento de la supervisión: La situación de Desyfin evidencia la necesidad de una supervisión más estricta por parte de las autoridades financieras para detectar y corregir a tiempo prácticas irregulares.

Transparencia financiera: Es fundamental que las instituciones financieras mantengan una transparencia total en sus estados financieros para evitar el ocultamiento de pérdidas o la sobrevaloración de activos.

Protección al ahorrante: Se destaca la importancia de mecanismos como el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) para proteger a los ahorrantes, aunque en este caso no se utilizará dicho fondo, ya que en el banco bueno existen suficientes activos para cubrir los depósitos garantizados.

5. Futuro del proceso y recomendaciones para los involucrados

Revisión de ofertas: Siete entidades financieras han mostrado interés en adquirir los activos y pasivos de Desyfin, habiendo firmado contratos de confidencialidad para realizar la debida diligencia. Se espera que las ofertas se reciban y analicen durante el primer trimestre del próximo año.

Comunicación constante: Es esencial que los ahorrantes, deudores y empleados se mantengan informados a través de los canales oficiales sobre el avance del proceso de resolución y las decisiones que se tomen.

Diversificación de riesgos: Para los ahorrantes e inversionistas, este caso subraya la importancia de diversificar sus inversiones y no concentrarlas en una sola entidad financiera.

Conclusión

En conclusión, el caso de Desyfin pone de manifiesto la importancia de una gestión financiera responsable y transparente, así como la necesidad de regulaciones y supervisiones efectivas para proteger a los ahorrantes y mantener la estabilidad del sistema financiero.

Fuente principal: El Financiero

Jorge Enrique Gutiérrez Guillen

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