Innovar, reto doble para empresas: expertos

¿Qué es lo primero que escuchamos al emprender? ¿Cuál es el imperativo de la mayoría de las empresas que se crean hoy día? “Debes tener una idea innovadora”, “hacer algo que nunca antes se haya hecho”. Todo parece indicar que innovar se ha puesto de moda, y que las “ideas disruptivas” se encuentran detrás de cientos (o quizá miles) de emprendimientos modernos.

Pero, ¿en qué consiste la innovación? ¿Debemos innovar así porque sí?

Cuatro expertos reflexionaron en torno al concepto de la innovación. ¿El reto? Ser vigentes en un mundo donde las tendencias cambian con una rapidez vertiginosa y, a la vez, mantenernos fiel a nuestra esencia.

“La innovación sin rumbo no tiene sentido alguno”

Hoy más que nunca, los negocios se enfrentan al desafío de ser relevantes para sus clientes. Pero, ¿cómo mantenerse vigentes con el paso del tiempo sin desgastar la marca? ¿Hay alguna fórmula secreta para encontrar ese equilibrio?

Por décadas, Vogue se ha convertido en un referente de la moda a nivel internacional. Hoy día, uno podría ver una sesión de fotos de 1950 y sentir que aún rompe moldes… como si se hubiera hecho ayer.  “Creo que es importante atrevernos a salir de la zona de confort. Ésa es la diferencia entre alguien que sigue las tendencias y alguien que es visionario”, explica al respecto Kelly Talamas, editora en jefe de la publicación en América Latina.

En ese sentido, Vogue ha tenido un acierto que pocas marcas pueden presumir: siempre se ha mantenido al tanto de las tendencias, pero sin convertirse en víctima de ellas ni abandonar su esencia. “Somos fieles a nuestras raíces. Si quieres ser relevante, primero que nada debes conocer perfectamente bien a tu producto. Después puedes buscar retroalimentación inmediata con tus lectores, algo que ahora resulta más fácil con los medios digitales”, abunda. Ése es el desafío: encontrar un balance entre lo que “está pasando allá afuera” y apegarse al corazón de una marca.

Para Horacio Genolet, CEO de Grupo Ogilvy, la innovación está sobreestimada. “Claro que innovar es importante, pero el valor de ésta reside en todo lo que construye alrededor. Las marcas tienen valores que hay que respetar, los pilares de construcción”, precisa.

Para Rodolfo Ramírez, fundador de RedBox, innovar no necesariamente es hacer algo espectacular o nunca antes visto. También se puede innovar realizando cambios pequeños, o incluso replanteando la estrategia de una marca y regresando a sus raíces.

El mercado actual: adaptarse o morir

Las cosas han cambiado: el mercado actual ya no es lo que era antes. ¿Cómo se han transformado los consumidores? ¿Cómo deben reaccionar las marcas ante estos cambios? “Veo mucha más hambre de la que había antes; es decir, un ambiente emprendedor muy activo y visionario”, comenta al respecto Eric Descombes, director de Mac Graw Hill en México y América Latina.

Rodolfo Ramírez considera que esto tiene que ver con las exigencias del mercado. “En la actualidad hay consumidores mucho más informados que antes. Esto nos vuelve mucho menos conservadores como sociedad, así que las propuestas pueden fluir con mayor facilidad”.

Pero esto conlleva también una mayor responsabilidad por parte de los emprendedores, quienes tienen el deber de aplicar las ideas innovadoras para mejorar sus marcas. “Tenemos la exigencia constante de mejorar el nivel de nuestros productos. También debemos contar con la capacidad de adaptarnos más rápido”, afirma Kelly. “Pero no podemos convertirnos en marcas que únicamente reaccionan: busquemos ser fieles a nuestra esencia y tener un plan que pueda ajustarse”.

4 claves para innovar con un negocio

Quedó claro que innovar sin rumbo fijo es una estrategia estéril. ¿Cómo podemos ser un negocio relevante sin despegarnos de nuestras raíces?

Para el fundador de RedBox la clave es definir una etapa del año para detectar tendencias y aterrizarlas, y dedicar los meses restantes a ejecutar tales ideas. “Debe ser un proceso muy disciplinado, un hábito que incorporemos al funcionamiento de nuestra empresa”, explica.

Genolet, un apasionado de la publicidad según sus propias palabras, asegura que el secreto está en nunca perder la curiosidad. “Cuando dejas de ser curioso, tu marca entra en una zona de confort y se arriesga a morir”. A la fórmula se debe añadir la pasión: “si tu negocio no te hace vibrar todas las mañanas, cámbiate de industria”, aconseja.

Por su parte, Talamas considera que para tener ideas frescas es conveniente rodearse de personas de diferentes industrias, personas que sean inspiradoras en sus propios ámbitos profesionales. “Para obtener ideas yo viajo mucho; me gusta conocer personas, salir y ver qué está pasando en el mundo. La inspiración puede venir de cualquier sitio”, afirma la experta.

Eric Descombes cree que la clave se encuentra escondida en una famosa frase de El Principito, de Antoine de Saint-Exupéry: “Lo esencial es invisible para los ojos”. “Guíate por lo que crees que es correcto, no por lo que dicte la razón. Aprende a confiar en tu intuición: ella te guiará”.