Vehículos Eléctricos en Costa Rica: Retos y Oportunidades
La movilidad eléctrica en Costa Rica ha crecido notablemente en los últimos años, pero enfrenta desafíos que pueden limitar su expansión. Un informe reciente del Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica (Mideplan) analiza las barreras y factores habilitantes que influyen en la adopción de vehículos eléctricos (VE) en el país.
Principales Limitaciones
Infraestructura de carga insuficiente
A pesar del aumento en la cantidad de cargadores, la red sigue concentrada en la Gran Área Metropolitana (GAM) y se considera insuficiente. No obstante, el gobierno ha anunciado iniciativas para expandir la infraestructura de carga a zonas rurales y costeras mediante alianzas con empresas privadas y municipalidades. Además, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) ha propuesto la instalación de nuevas estaciones de carga en rutas estratégicas para garantizar una mejor cobertura nacional. Según el informe Movilidad Eléctrica en Costa Rica: Oportunidades para una Sociedad Descarbonizada, elaborado a partir de un estudio de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), en abril de 2024 se registraban 17.154 automóviles eléctricos y 125 centros de recarga. Para febrero de 2025, la flotilla aumentó a 24.880 vehículos, pero sin un crecimiento proporcional en la infraestructura de carga.
Cargadores defectuosos y problemas técnicos
Entre enero de 2023 y abril de 2024, se reportaron 4.959 fallos en estaciones de carga. La principal causa de estos problemas (4.641 incidentes) fue la incompatibilidad de software, ya que muchos cargadores utilizan estándares europeos que no son compatibles con los vehículos eléctricos de origen chino, los cuales dominan el mercado costarricense.
Sistemas de pago no estandarizados
Cada proveedor de carga emplea un sistema de pago diferente, incluyendo aplicaciones móviles, tarjetas RFID y datáfonos, lo que genera confusión entre los usuarios. Sin embargo, se están desarrollando iniciativas tanto gubernamentales como privadas para unificar estos sistemas. La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) ha propuesto la creación de una plataforma interoperable que permita el acceso a todos los cargadores mediante un único método de pago. Además, algunas empresas privadas están implementando sistemas de pago integrados con aplicaciones bancarias para facilitar su uso. La falta de una plataforma unificada puede desmotivar la adopción de la movilidad eléctrica.
Capacidad de la red eléctrica
Aunque Costa Rica cuenta con una matriz energética casi 100% renovable, el informe de Mideplan advierte que, ante un aumento significativo de la flotilla eléctrica, será necesario reforzar la estabilidad y capacidad de la red.
Mitos y desinformación
El desconocimiento sobre el funcionamiento y beneficios de los VE sigue siendo un obstáculo. Persisten dudas sobre el rendimiento de las baterías, costos de mantenimiento y vida útil de los vehículos eléctricos.
Oferta limitada y largos tiempos de espera
El mercado costarricense cuenta con pocas opciones de vehículos eléctricos para transporte pesado y trabajos especializados. Además, la espera para adquirir ciertos modelos puede ser prolongada.
Exoneraciones fiscales con fecha de vencimiento
Los incentivos fiscales a los VE están programados para expirar en 2027, lo que podría desincentivar nuevas compras. Para mitigar este impacto, se han propuesto alternativas como la prórroga de los beneficios fiscales para vehículos con autonomía superior a cierto umbral, la reducción de aranceles para la importación de baterías y la implementación de incentivos por conversión de vehículos de combustión a eléctricos. Estas medidas podrían mantener el interés del mercado y acelerar la adopción de tecnologías más limpias. Actualmente, los VE cuentan con un esquema de exoneración del impuesto a la propiedad que disminuye progresivamente: 60% en 2024, 40% en 2025, 20% en 2026 y 0% en 2027.
Factores que Favorecen la Movilidad Eléctrica
Marco legal y promoción estatal
La Ley de Incentivos y Promoción para el Transporte Eléctrico (Ley 9.518) ha establecido bases legales para fomentar la movilidad eléctrica en el sector público y privado, asegurando beneficios fiscales y políticas de desarrollo.
Red Nacional de Carga Rápida
Aunque la infraestructura es insuficiente, Costa Rica cuenta con una red de carga rápida con estaciones ubicadas cada 120 kilómetros en carreteras cantonales y cada 80 kilómetros en carreteras nacionales. Como parte de los planes de expansión, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y empresas privadas han anunciado la instalación de nuevas estaciones de carga en regiones menos cubiertas, priorizando corredores turísticos y rutas comerciales clave. Además, se está evaluando la implementación de incentivos para que estaciones de servicio tradicionales instalen puntos de carga rápida, lo que facilitaría el acceso en áreas rurales y zonas de alto tránsito. Además, hay alrededor de 250 cargadores semirápidos.
Mayor competencia y reducción de precios
El incremento en la oferta de vehículos eléctricos y la competencia entre proveedores han impulsado una reducción en los precios, facilitando el acceso a estas tecnologías.
Crecimiento en servicios especializados
Cada vez hay más talleres especializados en movilidad eléctrica, lo que ha incrementado la confianza de los usuarios en el mantenimiento y reparación de sus vehículos.
Beneficios fiscales
Comparación de Impuestos entre Vehículos de Gasolina y Vehículos Eléctricos
Actualmente, los vehículos eléctricos en Costa Rica disfrutan de exenciones fiscales que los hacen más atractivos en comparación con los vehículos de combustión interna. Mientras que los VE están exentos del impuesto selectivo de consumo y reciben una reducción progresiva en el impuesto a la propiedad hasta 2027, los vehículos de gasolina enfrentan una carga tributaria significativamente mayor. Un automóvil de combustión interna está sujeto a un impuesto selectivo de consumo del 30% al 50%, dependiendo de su cilindrada y modelo, además del IVA completo y un impuesto anual sobre la propiedad sin reducciones. Estos incentivos buscan nivelar el costo inicial de los VE y fomentar la transición hacia una movilidad más limpia.
Incentivos para empresarios que adopten vehículos eléctricos (Aporte personal)
Para fomentar la adopción de vehículos eléctricos en el sector empresarial y promover la sostenibilidad, se ha propuesto la creación de beneficios fiscales específicos para empresas que incorporen VE en sus flotas. Estas iniciativas podrían incluir deducciones en el impuesto sobre la renta por la compra de vehículos eléctricos, reducción en tarifas de electricidad para la carga de estos vehículos y acceso a financiamiento preferencial para la conversión de flotillas. Además, se plantea la posibilidad de otorgar créditos fiscales a las empresas que inviertan en infraestructura de carga accesible al público, incentivando así el desarrollo de una red más robusta y descentralizada.
Además de las exoneraciones del impuesto a la propiedad, los VE han contado con un esquema escalonado de exención del IVA desde 2022, aumentando un punto porcentual por año hasta alcanzar la tarifa general en 2035. También están exentos del impuesto selectivo de consumo y sobre el valor aduanero bajo un esquema gradual. Otros beneficios incluyen circulación libre de restricción vehicular y zonas de parqueo preferencial.
Crecimiento exponencial de la flotilla eléctrica
Según el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), la flotilla de vehículos eléctricos en Costa Rica ha crecido un 1.398% entre 2018 y 2025, pasando de 1.661 a 24.880 unidades. El crecimiento más alto se registró entre 2023 y 2024, con un 86% de aumento en la cantidad de VE. Este crecimiento acelerado se debe a varios factores, incluyendo la reducción de precios impulsada por una mayor competencia en el mercado, el aumento de opciones de financiamiento con tasas preferenciales y la mejora en la infraestructura de carga, especialmente en la Gran Área Metropolitana. Además, los incentivos fiscales y la mayor disponibilidad de modelos con mayor autonomía han generado confianza en los consumidores, facilitando la adopción masiva de esta tecnología.
Impacto Ambiental y Reducción de Emisiones de CO₂
Comparación Internacional del Uso de Vehículos Eléctricos
País Líder en Fabricación de Vehículos Eléctricos
China lidera la producción global de vehículos eléctricos, representando más del 50% de la fabricación mundial. Empresas como BYD, NIO y Tesla Shanghai han impulsado el desarrollo de esta industria con una capacidad de manufactura masiva, bajos costos de producción y un fuerte apoyo gubernamental. Además, China domina la cadena de suministro de baterías de iones de litio, lo que le otorga una ventaja estratégica en el mercado de movilidad eléctrica. El país con mayor adopción de vehículos eléctricos en el mundo es Noruega, donde más del 80% de los automóviles nuevos vendidos en 2024 fueron eléctricos, gracias a incentivos fiscales agresivos, una infraestructura de carga altamente desarrollada y políticas gubernamentales enfocadas en la electrificación del transporte. En contraste, países con menor adopción, como India y Sudáfrica, enfrentan desafíos como la falta de infraestructura de carga, altos costos iniciales y menor disponibilidad de modelos eléctricos accesibles. Costa Rica se encuentra en una posición intermedia, con un crecimiento acelerado pero con retos importantes para igualar a los países líderes en movilidad eléctrica. Uno de los principales beneficios de la adopción de vehículos eléctricos en Costa Rica es la reducción de emisiones contaminantes. Según datos del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), el transporte es responsable de aproximadamente el 40% de las emisiones de CO₂ del país. Con el crecimiento exponencial de la flotilla eléctrica, se estima que la movilidad eléctrica ha contribuido a una disminución significativa en la huella de carbono del sector transporte. Además, esta transición apoya el objetivo del país de alcanzar la carbono neutralidad para 2050.
Desafíos en la Producción y Reciclaje de Baterías
Si bien los vehículos eléctricos reducen la contaminación ambiental durante su uso, la producción y disposición de sus baterías plantea desafíos. La extracción de materiales como litio y cobalto tiene impactos ambientales significativos, y la falta de infraestructura de reciclaje puede convertirse en un problema a largo plazo. En este sentido, es clave el desarrollo de políticas que fomenten la reutilización y reciclaje de baterías en Costa Rica. Existen iniciativas en otros países que pueden servir como referencia, como la implementación de programas de reciclaje obligatorios y la promoción de tecnologías de baterías más sostenibles.
Conclusión
La movilidad eléctrica en Costa Rica ha avanzado significativamente, pero enfrenta retos que requieren atención para garantizar su éxito. La infraestructura de carga, la estandarización de pagos y la compatibilidad tecnológica son desafíos clave. Sin embargo, el marco normativo, la creciente competencia y los beneficios fiscales han permitido que cada vez más costarricenses consideren la transición hacia vehículos eléctricos. La sostenibilidad del crecimiento dependerá de cómo el país logre superar estas barreras en los próximos años.
Fuente: La Nación, Delfino.cr, El Financiero
Jorge Gutiérrez Guillén
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